miércoles, octubre 04, 2006

Caerse y estrallarse no es lo mismo

Caerse es llegar al suelo por haber perdido el equilibrio, pero de una manera graciosa y sin estruendos. Estrallarse es lo mismo pero con una bulla y aparataje tal que hace que la gente vire la cabeza para ver que fue lo que pasó. Las caidas provocan un poco risa, pero los estrallones luego de la primera risa causan preocupación.

Hay estrallones que son un abuso. Como el que se dió el Bebo un día que depositó sus 255 libras (que tenía en esa epóca porque ahora pesa más) en una fragil silla en casa de mi amiga Arelys. Que estrallón!!!. La pena fue la despatillada que se dió la silla y que se le descompletó el juego de comedor a mi pobre amiga.

Hay estrallones que dan mucha pena. Como uno que se dió mi papá en un viaje que hizo a Miami. Yo sólo le ví el golpe en la pierna cuando regresó pero todavía me da mucha pena pensar en el estrallón que se dió mi papá.

Pero hay estrallones que el que se cae se tiene que reir para disimular la verguenza. Yo siempre camino con cuidado y pocas veces me he caido pero he sufrido dos estrallones que me han marcado.

Uno fue en una discoteca luego de haberme bebido varios Tequila Sunrise, bailando "Dale p'a bajo" de los Hermanos Rosario. Yo muy coqueta bajaba junto con el coro y cuando fui a subir las rodillas no me respondieron. Caí de espalda en una mesa y tumbé todos los vasos y botellas que estaban ahí. Esto es un estrallón, porque encima de que me caí, el ruido de los cristales llamó la atención de todo el que estaba alrededor. Dios mío, todavía me acuerdo y me da verguenza!!!

El otro estrallón fue un 14 de febrero. Iba bajando las escaleras con un enamorado porque íbamos a cenar. Yo iba toda bella. Llevaba puesto un vestido blanco ajustado. Las escaleras estaban mojadas porque había llovido y sin importar la precaución con la que iba bajando me dí un tremendo estrallón. El vestido se me mojó y me tuve que devolver a cambiarme. Terminamos comiendo pizza. Que verguenza!!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pobre silla!
Pobre vestido!

Mientras nada del cuerpo se rompa, los estrallones seguiran siendo graciosos.

No se por qué será que cuando una mujer se cae, nos reimos mas?

Sera por la escasez de ese acontecimiento